Alto al genocidio del pueblo palestino. Cristóbal León Campos
Al cumplirse un mes del recrudecimiento del genocidio que el sionismo israelí comete contra el pueblo palestino, las cifras dantescas indican que, desde el pasado 7 de octubre, más de 10 mil palestinos han sido asesinados por los bombardeos israelitas y al menos 4 mil de las pérdidas humanas corresponden a infantes (niñas y niños), algo atroz en la era de la “civilización”, aunque en realidad estamos en un periodo de tránsito, entre el fin de capitalismo y de su fase imperialista, y el surgimiento de un mundo diferente que aún debemos terminar de idear y concretar.
En este corte temporal, es importante hacer hincapié en el hecho de que durante este mes lo que ha acontecido es la exacerbación de los crímenes de Lesa Humanidad cometidos por el sionism0 israelí, y esos crímenes efectuados desde hace décadas dan forma al genocidio articulado por el Gobierno de Israel con el apoyo del imperialismo estadounidense y las potencias europeas, y reiterar esto no es repetirse, sino combatir la campaña de mentiras difundidas por muchos medios al servicio de la muerte y del capital, en este caso representado por el sionismo y sus fieles aliados.
En estos últimos días, varias voces de políticos israelitas, desde las tribunas del poder sionista, han lanzado sin reserva la posibilidad de utilizar armas nucleares, o específicamente una bomba atómica, en la Franja de Gaza, y sí, así como se lee, algo que ni los más recalcitrantes militantes del imperialismo estadounidense se atreven a decir en voz alta, siendo ellos quienes las usaron en 1945 contra el pueblo japonés, y algo que ni en los días más duros de la Guerra Fría se llegó a escuchar. Tal crudeza inhumana se fundamenta en el principio de “superioridad” que el sionismo ha cultivado para sí mismo, siendo que fueron ideas de ese tipo las que propiciaron el Holocausto sufrido por el pueblo israelí durante la Segunda Guerra Mundial; y entonces, qué pensar y sentir ante estas amenazas en un contexto cada vez más álgido y complejo en el escenario político-económico de Medio Oriente, ¿y acaso todavía hay quien pueda dudar que estamos viviendo un genocidio totalmente despiadado y calculado?
El incremento en la violencia israelí contra el pueblo palestino ha provocado que, desde el 9 de octubre, la Franja de Gaza esté en “total asedio” por parte de las fuerzas militares sionistas de ocupación, habiendo cortado los suministros de agua, electricidad y alimentos. El Gobierno de Israel ha rechazado reiteradamente las propuestas de una tregua humanitaria, de la apertura de corredores humanitarios y de cualquier otra forma de apoyo a la población civil palestina, que ya registra un desplazamiento de 1 millón 500 mil personas dentro de su territorio, según datos proporcionados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Cifras que evidencian la vileza de las acciones sionistas y la complicidad de las potencias occidentales, que callan o apenas esbozan simuladas preocupaciones sin tomar medidas reales contra Israel, como sí lo hicieron contra Rusia al iniciarse el actual conflicto con Ucrania, ¿será esto último una casualidad?
El panorama es cada día más entristecedor y preocupante, los oídos sordos al clamor mundial por el fin de las acciones bélicas israelitas, y la campaña de exterminio sionista contra el pueblo palestino, llevan a la humanidad a definirse con claridad y sin titubeos. Por eso, sin la mejor dubitación, gritamos: ¡ALTO AL GENOCIDIO CONTRA EL PUEBLO PALESTINO!