Bachellet-Borrell-Biden, la Triple B. Ramón Pedregal Casanova
• Michelle Bachellet desde su oficina en la ONU, Borrell y Biden, no cesan en su campaña contra Nicaragua, llama a quienes como ella obedecen a los conquistadores a “no reconocer las elecciones por las violaciones de Derechos Humanos desde 2018” y reclama “derechos y libertades públicas y el Estado de derecho imparcial”, para, con esas consignas, atacar tres leyes: la primera sobre Agentes extranjeros; la segunda sobre ciberdelitos; y la tercera la que se refiere a la independencia, soberanía y autodeterminación.
Bachellet- Borrell- Biden, La Triple B, declararon antes de las elecciones del 7 de noviembre que esas leyes podían perjudicar a “la libertad de expresión, reunión, asociación y participación política, especialmente de cara a las elecciones”; a eso añadían que les preocupaba la reforma en las leyes para castigar con cadena perpetua los “delitos de odio”.
• El no reconocimiento de las elecciones venía mandado por Biden meses antes de que se realizasen. La razón era que después de su intento de golpe en 2018, fracasado pero que causó un daño de 24.000 millones de dólares a la nación, preparaban a la carrera una nueva entrada en escena para procurar la desestabilización, y con ello declarar las próximas elecciones como imposibles de realizar. El asunto es que sus dirigentes en Nicaragua fueron descubiertos con las manos en la masa, ¿vulgar, verdad?
1- Delitos de odio: Si en 2018 dejaron casi 300 muertos y miles de heridos, pérdidas multimillonarias en bienes públicos y ruina para muchos nicaragüenses, ¿cuántos muertos y heridos estaban dispuestos a causar en la que preparaban?, ¿cuánta destrucción de bienes públicos?: alguno de ellos declaró que tenían que eliminar a 3 millones de personas. Con respecto a esa primera Ley por delitos de odio, que pone a La Triple B en contra, ¿para Bachellet- Borrell- Biden, asesinar y destruir los bienes del pueblo, puede ser considerado “delito de odio”?
2- Independencia, soberanía, autodeterminación: Los cuadros del interior de La Triple B pedían públicamente la intervención del ejército estadounidense, la invasión, el bombardeo, la ocupación y el nombramiento de un, su, gobierno. Habría que pensar qué entiende la señora Bachellet por “derecho de independencia, soberanía y autodeterminación”, ¿para Bachellet- Borrell- Biden, invadir un país, bombardearlo, ocuparlo y nombrar un gobierno que no quiere el pueblo es considerado “soberanía, independencia y derecho de autodeterminación”? Todos los días nos lo quieren meter en la cabeza y no les damos la razón.
3- Ciberdelitos: Cuando los servidores de La Triple B, bajo el gobierno Trump, tomaron las redes cibernéticas, el fascismo se hacía dueño de las comunicaciones vía internet, (además de ser dueños de la inmensa mayoría de los restantes medios de difusión) y lanzaba ataques propagando noticias falsas sobre Nicaragua; en ellas atribuían a la movilización popular los ataques que sus mercenarios llevaban a cabo: ¿debemos pensar que para La Triple B, Bachellet- Borrell- Biden, esos actos no son “ciberdelito”?
4- Ley de Agentes extranjeros: Lo que ha dejado a los continuadores del intento de golpe de 2018 sin la primera fila de mando en el interior de Nicaragua ha sido la captura de sus agentes principales, eso es: con las manos en la masa. Los millones que desde el aparato imperialista les llegaban para apoyar la revuelta ya no circulan. A eso se refiere la primera de las leyes aprobadas por el Gobierno para proteger los derechos del pueblo: la “ley de Agentes extranjeros”. ¿También le revuelve las triples a La Triple B, Bachellet- Borrell- Biden?, ¿por qué? La ley pide que las organizaciones de cualquier tipo que intervienen en el país declaren si reciben dinero de fuera, con qué fin y en qué lo van a emplear. La ley de Agentes extranjeros está aprobada en la mayoría de los países, y los primeros son los que se sitúan bajo el manto de La Triple B, y la cabeza de éstos es EEUU. ¿Quieren que creamos que sus Agentes extranjeros gozan de impunidad en cualquier parte?: en los países independientes, soberanos, que han ejercido el derecho de autodeterminación, que disponen de libertad de expresión, que se protegen de los espías extranjeros mediante la ley correspondiente, quienes delinquen no tiene impunidad.
Hubo en Argentina una organización fascista que se llamaba La Triple A. Desde la oficina de Bachellet en la ONU, desde la U.E. con Borrell, desde la Casa Blanca con Biden quieren disciplinar a los pueblos que disienten, es el objetivo escrito en la Historia de todas las cúspides imperialistas. Y en la misma línea actúan contra Cuba y Venezuela.
• Señora Bachellet, que mediante sus empleados en la ONU difunde las versiones de Borrell y Biden: permita que le diga que se la ve triste, no quiere ni hablar de los avances sociales del pueblo nicaragüense, sin analfabetismo, con sanidad y educación universales y gratuitas, reduciendo la pobreza y produciendo sus alimentos, con vías de comunicación como ningún país de la región tiene, con igualdad de género, con reducción de diferencias sociales. A quien lee le voy a dar unos datos sobre el próximo presupuesto del gobierno que La Triple B no controla:
El 58, 8 % del presupuesto del Gobierno de Nicaragua para el próximo año va a destinarse a políticas sociales. Y de ese 58, 8 % el 22, 2 % va a sanidad, y el resto a educación y algún otro menester. Debe saber que en el último trimestre la producción del país ha crecido un 8% y las perspectivas para el año que entra son muy favorables.
Las buenas noticias de Nicaragua le fastidian ¿verdad, Triple B?