El 17 de abril en las casas de Palestina. Ramón Pedregal Casanova.
El 17 de abril en todas las casas de Palestina se sentirá más que ningún día al prisionero y a la prisionera. Se leerán sus cartas, y se hablará de ellos y ellas con las palabras más hermosas. En todas las casas de Palestina se les verá y se les abrazará.
Aquí nuestras palabras, para las gentes solidarias y los pueblos, dedicadas a hermanos tan queridos:
Desde la Coalición Europea de Apoyo a los Prisioneros de Guerra Palestinos (POWs) en las cárceles israelíes, en medio de la brutal campaña de las autoridades de ocupación contra todo el pueblo palestino, en particular contra los luchadores por la libertad en las prisiones, queremos resaltar que son más de 4.400 prisioneros de guerra, incluidas 33 mujeres y niñas, más de 160 niños menores de 18 años y más de 500 detenidos “administrativos”, incluidos 8 parlamentarios electos. Hay más de 600 prisioneros de guerra que padecen enfermedades terminales o graves, como cáncer y parálisis parcial y total. El trato israelí a los prisioneros de guerra y detenidos palestinos puede constituir crímenes de guerra y crímenes en contra de la humanidad si la Corte Penal Internacional (CPI) los investiga adecuadamente.
Israel continúa negando a los prisioneros de guerra y a los detenidos palestinos sus derechos básicos garantizados por las convenciones y normas internacionales, y continúa con sus medidas y prácticas represivas que incluyen el aislamiento, la tortura y el uso de la fuerza que se ha intensificado significativamente desde la fuga de 6 prisioneros de guerra palestinos del centro penitenciario de alta seguridad de Gilboa.
Entre las muchas medidas brutales que Israel aplica contra el pueblo palestino en su conjunto, la escalada de arrestos, incluidos niños y mujeres, la continua tortura sistemática de prisioneros y detenidos, la continuación de la política de castigo colectivo de sus familias y la prolongada detención de 8 cuerpos de presos que fallecieron en prisión, en gran parte por negligencia médica.
Tras el intento de fuga por el “Túnel de la Libertad”, en septiembre pasado, las autoridades de ocupación israelíes intensificaron sus duras medidas de abuso y opresión contra los prisioneros de guerra y los detenidos palestinos. Trasladaron a un gran número a celdas de aislamiento incluidos los seis presos que lograron liberarse de la prisión de Gilboa. La política de castigo colectivo contra prisioneros de guerra y detenidos palestinos se intensificó, lo que llevó a decenas de detenidos a participar en huelgas de hambre individuales para rechazar su detención administrativa. A principios de enero los detenidos administrativos anunciaron una posición colectiva declarando un boicot firme y completo de todos los procedimientos judiciales relacionados con la detención administrativa en los tribunales israelíes.
En febrero pasado los prisioneros de guerra palestinos en las cárceles israelíes anunciaron que realizarían una huelga general el 25 de marzo si no se levantaban las medidas restrictivas de la administración penitenciaria que restringían sus derechos básicos, incluida la porción de comida. Esta amenaza seria, que muestra la unidad y la firme voluntad de todos los palestinos en las cárceles israelíes, alarmó a la administración penitenciaria para suspender las medidas y responder a las demandas humanitarias de los presos, lo que llevó a la suspensión de la huelga.
La Coalición Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos, mientras continúa su apoyo a la lucha de todos los hombres y mujeres en las cárceles y centros de detención israelíes hasta que recuperen su libertad y sus derechos legales y humanos, declara su absoluta condena a la política de la represión y los abusos practicados por las autoridades de ocupación israelíes contra todos los prisioneros, ya que viola el derecho internacional humanitario, en particular el Tercer y Cuarto Convenio de Ginebra de 1949.
La Coalición, mientras continúa con sus actividades, está decidida a internacionalizar la causa de los prisioneros de guerra palestinos, a fin de lograr su libertad y la de todos los detenidos en las cárceles israelíes y restaurar su dignidad y derechos legítimos, legales y humanitarios, incluido su derecho al tratamiento y la atención médica adecuada a los enfermos, el derecho a la educación y otros derechos básicos garantizados por el derecho internacional humanitario.
Libertad para todos los presos enfermos, libertad para todos los niños, mujeres y ancianos.
Libertad para los detenidos administrativos.
Libertad para todos aquellos que sacrificaron su propia libertad en aras de la libertad de su pueblo.
Coalición Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos.