La censura es para ti. El lince
El IV Reich sionista, antes conocido como Israel, ha establecido una draconiana censura sobre los ataques de respuesta de Irán a la guerra lanzada contra este país por Occidente, como bien reconoció el canciller alemán. Pero esa censura es para ti, no para los incrédulos sionistas que están viendo que no son inmunes a lo que ellos están acostumbrados a hacer a otros pueblos. A los palestinos especialmente. Ellos lo ven y lo sufren. Y están atónitos. No lo pueden creer.
Si te crees los cuentos del estercolero mediático occidental tienes el cerebro plano. Para ti es la censura. Con un cerebro plano siempre se creerá a los agresores y nunca a los agredidos. Y menos cuanto estos agredidos son tan arrogantes que se atreven a responder a la agresión. Si el IVRS oculta, ya de por sí eso tendría que hacerte pensar el por qué. Porque las cosas no van bien para la vanguardia de Occidente en la guerra lanzada contra el nuevo mundo en marcha.
La ciudadanía del IVRS tiene ojos, y teléfonos móviles. Y ven y graban por la mañana y corren despavoridos por la noche a los refugios. Pero ven y graban. La censura no es para ellos. Es para ti. No es para ocultárselo a quienes lo ven. Es para ocultárselo a quienes les apoyan y financian. A ti. A ti, que pagas sus bombas. A ti, que apoyas a gobiernos que dicen sin tapujos que el IVRS está haciendo el trabajo sucio a Occidente. A ti, que apoyas el rearme. A ti, que te crees la estupidez de que Rusia te va a invadir mañana.
Ya nadie recuerda las mentiras de las armas de destrucción masiva en Irak. Y por eso hay que decir que Irán está a dos minutos de fabricar armas nucleares. La mentira es la forma sustancial de las «democracias» occidentales. Porque tú te lo crees todo. Y por eso la censura que está imponiendo el IVRS es para ti. Para que sigas igual.
En Palestina, en Gaza, hasta los ciegos pueden ver el genocidio. Aquí hasta tú lo puedes ver. Pero tú eres un ciego ahora mismo con el IVRS. Te está ocultando los daños infringidos por Irán y lo que te muestra, como lo del hospital de hoy, no es más que otra mentira. Y la transmiten los medios del estercolero mediático. Pero el hospital no ha sido objeto del ataque, sino que está cerca del centro de comando e inteligencia del IVRS. Esa es la diferencia entre Occidente e Irán, que el IVRS, la vanguardia de Occidente en esta guerra contra el nuevo mundo en marcha, ha bombardeado y destruido 36 hospitales en Gaza, 40 hospitales en Líbano y 3, por ahora, en Irán. Y Occidente no ha derramado ni una sola lágrima por ello.
Tu opinión no cuenta, si es que la tienes. Pero cuenta menos si no sabes. Por eso la censura es para ti. Pero las imágenes están ahí, siguen saliendo aunque sea con cuentagotas y Occidente no tiene el control de la narrativa. Por eso quiere tener el control de tu cabeza.
La cobertura a medias sigue siendo un método de control de la mente, pero si no existe ni siquiera la media, tampoco existe la mente. Eso es lo que quiere Occidente. Por eso la censura es para ti, para que pierdas el hilo si es que alguna vez lo has encontrado, para que no pienses, para que sigas creyéndote todo lo que te dicen. Es una señal de debilidad, no de fortaleza. Así que piensa.
Piensa y recuerda. No olvides que esto sigue pasando y que Occidente no dice nada, pero esto también es el trabajo sucio que está haciendo el IVRS para Occidente.
Irán va a «emprender acciones legales contra la inacción del jefe del Organismo Internacional de la Energía Atómica» tras los ataques de la vanguardia de Occidente, el IVRS, contra las instalaciones nucleares. Irán, al igual que Rusia, confía inútilmente en el derecho internacional y dice que «los ataques del régimen israelí a las instalaciones nucleares iraníes constituyen una clara violación de la Convención de Ginebra y los protocolos relacionados, la Carta de las Naciones Unidas y el Comité Científico de las Naciones Unidas sobre las Obras de Armas Atómicas, el Tratado de No Proliferación Nuclear, el Acuerdo Completo de No Proliferación entre Irán y la agencia de la ONU, las normas de seguridad de la agencia de la ONU y otras convenciones internacionales pertinentes».
Tiene toda la razón y lo que dice es correcto. Pero inútil. Occidente no va a hacer nada porque Occidente controla el OIEA. El silencio de este engendro demuestra lo que es, un instrumento en manos de Occidente y es, objetivamente, un cómplice de la guerra lanzada contra Irán.
(Publicado en el blog del autor, el 19 de junio de 2025)