Las tres reglas. El lince
Irán respondió al IV Reich sionista, antes conocido como Israel, y volvió a demostrar que llega donde quiere. Y volvió a mostrar moderación, pese a todo. Antes del ataque, y fue lo que me confundió, había visto unas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores en las que hablaba de los BRICS y daba a entender que Irán se contendría en su respuesta a los ataques del IVRS para no enturbiar una cumbre (22-24 de octubre) en la que están depositadas muchas esperanzas. Así que me equivoqué cuando dije que Irán no haría nada hasta esa cumbre.
Desde esas declaraciones hasta ayer las cosas se han movido muy rápido, sobre todo porque el presidente iraní dijo, y no ha sido desmentido, que EEUU prometió a Irán después del asesinato de Haniye en Teherán que si demostraba autocontrol obligaría al IVRS a establecer un alto el fuego en Gaza. No solo no ocurrió, sino que el IVRS fue más allá y asesinó a Nasrala. Eso obligó a Irán a dejar la moderación inicial, estratégica, y a actuar, con los resultados ya vistos.
Eso significa que todo el mundo tiene que tener presente las tres reglas:
1.- Nunca confíes en Occidente.
2.- Nunca confíes en Occidente.
3.- Si Occidente te habla de paz, prepárate a luchar.
Un día después del momento histórico vivido ayer, toda la putrefacción occidental permite otra vez oler todo el hedor que desprende Occidente cuando minusvaloran la respuesta iraní: no hubo daños apenas, casi todo fue derribado, etc. A falta de imágenes satelitales, esas que son tan prontas en aparecer cuando el país 404, antes conocido como Ucrania, realiza tal o cual ataque a Rusia, hay que hacer caso a quien más sabe de todo esto: Rusia. No en vano su primer ministro estaba en Irán la víspera de la respuesta armada y seguro que se le comunicó que la iba a haber, de ahí la extraña reunión de Putin en el Kremlin con el gabinete de seguridad ese mismo día. Y los rusos consideran que la efectividad de los misiles lanzados fue de entre el 60% y 70%, rebajando la cifra del 80% dicha por Irán y despreciando la occidental de que no pasó casi nada y que los daños fueron menores.
Una pequeña demostración de la mentira sionista y occidental.
Internet está llena de vídeos así con las llegadas y eso, por sí solo, ya desmiente al estercolero mediático occidental. Pero eso es casi lo de menos. Por supuesto que ningún miembro del estercolero recogerá que Irán ha comunicado a la ONU que “La República Islámica de Irán ha ejercido únicamente su derecho a la defensa legítima, conforme al artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas (ONU), y ha dirigido sus ataques exclusivamente contra las bases militares y de seguridad del régimen sionista”. Cuando a Occidente se le llena la boca con eso del «derecho a la autodefensa», que no tiene porque el IVRS es una potencia ocupante, como ha dicho la Corte Internacional de Justicia, lo oculta cuando son otros quienes, con toda la razón, lo proclaman.
El viernes el ayatolá Jamenei dirigirá la oración. No lo hace desde 2020 después de los ataques con misiles de Irán a las bases estadounidenses en Irak tras el asesinato del general Soleimani. Lo que diga será determinante para el mundo, incluido el IVRS.
Mientras tanto, el IVRS ha entrado unos pocos cientos de metros en Líbano y ya tiene las primeras bajas, que oscilan entre los 14 y los 35 muertos, según a quien creas. Y contando. Una actitud combativa de Hizbulá que contrasta con la cobardía del ejército libanés y de su presidente, que dice que el ejército «puede hacer lo que considere apropiado para proteger al Líbano y al establecimiento militar», a la luz de la agresión israelí. Lo más apropiado para Líbano debe ser que destruyan una parte sin que haya protesta alguna. Y, como os comenté, sigue Occidente comprando a personajes como este: anuncia la «entrega inmediata» de 200 millones de dólares.
Por el momento, hay enfrentamientos en cuatro aldeas, que son las que están en rojo en este mapa. Los puntos azules indican la zona del IVRS que ha sido declarada «cerrada» por el IVRS sionista. La parte reflejada en azul claro dentro de esas líneas azules son las Granjas de la Shebaa, ocupadas por el IVRS desde 1981 (sin que Occidente proteste).