Muchas cosas se mueven. El lince
Y ninguna buena para el Occidente colectivo.
1.- Malí ha decidido que el bambara, lengua mayoritaria en el país de raíz mandinga, sea el idioma oficial en todas sus expresiones, incluidas las oficiales, relegando al francés, hasta ahora la lengua oficial y su uso considerado como un «elemento de prestigio social». Las lenguas bambara, dogo o el hazanía árabe eran consideradas como segundas lenguas. Ya no será así, sino al revés. «Dansé» (bienvenida) la decisión. Hace algo menos de un año Malí suspendió todas las emisiones de medios de comunicación franceses por cómo trataban la situación en el país africano y en los del Sahel. La descolonización total de Malí va a buen ritmo.
Asistimos a una nueva fase de la revuelta anticolonial en África, con Francia perdiendo de forma clara el control de algunas de sus antiguas colonias: Burkina Faso, Guinea y Malí. Por esta razón, la semana pasada EEUU, Gran Bretaña, Francia, Japón, Malta, Suiza y Ecuador pidieron una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para «abordar la situación en Malí». Se necesitaban dos países más que se sumasen a esa iniciativa, y no lo lograron. Por esa razón, el Consejo de Seguridad de la ONU se opuso a la iniciativa. Un claro revés para Occidente y sus vasallos.
El hecho de que el banco central francés atesore legalmente el 50% de las reservas de los países del Sahel, de las antiguas colonias francesas, no importa. Fue una condición impuesta a las colonias para aceptar su independencia formal de Francia. No hay nada que discutir aquí. Es «legal». De la legalidad del «orden y sus reglas» occidental.
Malí es uno de los países más pobres del mundo, con una situación económica paupérrima como consecuencia de los ataques islamistas, con robo de ganado y quema de cosechas, sin que la fuerza militar europea (españoles incluidos en ella) hiciese nada al respecto. Por eso se produjeron los dos golpes militares y por eso la población responsabiliza a Francia (el dicho «los franceses protegieron a los terroristas» es muy popular) que, además, ha impuesto sanciones a Malí, propias y a través de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), un instrumento creado por el colonialismo para mantener a las antiguas colonias bajo su control.
Para que os hagáis a la idea, esta es la realidad actual en esa parte de África. Pero no hay neocolonialismo y Europa es un jardín.
2.- Sudán y Rusia firman un acuerdo para abrir una base naval en el Mar Rojo. La cosa se iba negociando desde 2019, pero un golpe militar pro-occidental primero, luego por la burocracia rusa -lenta y desesperante- retrasó el hecho que ahora se ha retomado. Rusia podía contar con ella ya, pero ahora se ha dado prisa porque la necesita no solo para temas militares en África, sino para rutas civiles y, sobre todo, para hacer frente a las sanciones occidentales -ilegales, según el derecho internacional- y mover mercancías fuera de los circuitos «convencionales».
Además, Sudán y Rusia han firmado acuerdos sobre el suministro de recursos energéticos, alimentos y fertilizantes a países africanos para paliar la situación provocada por la sequía, la crisis ucraniana y las actividades de grupos islamistas radicales.
Si se tiene en cuenta que la Secretaria del Tesoro de EEUU visitó tres países africanos a finales de enero buscando activamente disuadir a África de cualquier cooperación con Rusia, combinando amenazas y promesas, sobre todo las primeras cuando dijo “si los países africanos violan las sanciones contra Rusia, Washington responderá rápida y decisivamente”, la cosa no parece haber hecho mucho efecto. Al igual que el mantra occidental del «aislamiento» de Rusia.
3.- China revela planes de cooperación militar con estados árabes. ¿Recordáis lo que os conté sobre la «Cumbre de los Tres Anillos» -Arabia Saudita, Consejo de Cooperación del Golfo y la Liga Árabe-, donde no solo de habló de la desdolarización del petróleo, sino de «discusiones a puerta cerrada sobre temas militares y de seguridad»? Pues ya tenemos las dos cosas, y en el lapso de tiempo de dos meses: la primera cuando Arabia Saudita anunció que estaba dispuesta a negociar la venta del petróleo en otras monedas que no sean el dólar; la segunda, ahora.
Súmese a eso que el presidente iraní está de visita en China en estos momentos y que en su delegación, y como número tres tras él y el ministro de Petróleo, está el presidente del Banco Central de Irán. Es decir, se va a dar un impulso al comercio del petróleo en yuanes y a través de mecanismos no occidentales. El año pasado, y pese a las sanciones occidentales, el comercio entre ambos países creció un 7%, alcanzando el equivalente a los 15.000 millones de dólares.
4.- Y lo mismo con Brasil. La semana pasada China y Brasil firmaron un memorando de entendimiento sobre la creación de acuerdos de compensación de yuanes en Brasil. El país latino, ya durante la etapa de Bolsonaro, redujo su volumen de reservas en moneda occidental tras el robo de las reservas de divisas realizado a Rusia, y las aumentó en yuanes. Este paso dado ahora bajo la presidencia de Lula es lógico y sigue la estela anterior.
Con la incorporación de Brasil al comercio en yuanes, son ya 25 países los que pueden hacer lo mismo. China va dando pasos para la internacionalización del yuan, que aún no es oficial.
5.- Hungría da un paso más hacia su soberanía pese a la UE y la OTAN: el Ministerio de Defensa ha «despedido», según los pro-occidentales, o «relevado para el rejuvenecimiento y modernización del Ejército», según el gobierno, a 170 oficiales militares de algo rango (generales, coroneles y tenientes coroneles). Dada la postura crítica de Hungría con la UE y la OTAN por cómo se está apoyando al país 404, antes conocido como Ucrania, y si se tiene en cuenta que Hungría es el único país de la UE y de la OTAN que se ha negado a enviar armas al país 404, es muy probable que los pro-occidentales tengan razón cuando hablan de «purga de oficiales pro-OTAN».
6.- ¿Hungría se está preparando para algo? Mera especulación a día de hoy. Lo cierto es que la OTAN (EEUU y sus vasallos) están cada vez más apurados en el país 404. El perro faldero que hace de secretario general de la OTAN dice abiertamente en una reunión de ministros de Defensa el lunes pasado que el país 404, antes conocido como Ucrania, «consume enormes cantidades de municiones» por lo que las empresas occidentales «están bajo presión». Es decir, no pueden reponer ni a corto ni a medio plazo lo que han enviado a los neonazis. El propio perro faldero estima un plazo de entre 12 y 18 meses para reponer lo gastado hasta ahora. Dicho en otras palabras: la OTAN (30 países) está desangrándose y no puede competir contra un único adversario.
Este reconocimiento va parejo al aviso que Francia y Canadá han hecho a sus ciudadanos para que abandonen de inmediato Bielorrusia y lo mismo ha hecho EEUU respecto a Rusia. Es una acción coordinada que implica acciones en estos países de cualquier cariz, tipo asesinato de la hija de Dugin o sabotajes a oleoductos y así.
Occidente ya va a la desesperada, y va a morir matando. Literalmente. En la reunión de ayer de ministros de la OTAN, EEUU, el capo de la mafia, lo dejó muy claro: «22 países han prometido vehículos de combate de infantería, 16 han prometido artillería y municiones y 9 más han prometido artillería de defensa aérea». Pero no hay ninguna guerra mundial, qué va. «Es para defender el orden internacional basado en reglas que rechaza la idea de que las naciones grandes, fuertes y poderosas pueden atacar a otros países más pequeños cuyas fronteras no cambiarán». Bueno, salvo Kosovo, Yugoslavia, Afganistán, Irak (dos veces), Siria, Libia, Panamá, República Dominicana, Vietnam, etc.
En Occidente, además de locos, lo que hay son mentirosos patológicos. Con un día de diferencia se contradicen a sí mismos, a tenor de lo que dijo también el perro faldero secretario general de la OTAN. Es el estertor del agónico, hablando por hablar y muriendo por morir. Por eso lo del país 404, porque si existiese no llevaría a su gente al matadero. Es raro encontrar vídeos así, pero parece que los rusos están comenzando a visibilizar ese matadero. Aquí, muertos ucranianos en la zona de Artemovsk a mayor gloria de la OTAN.