Nicaragua 2018: liberando la verdad
Nicaragua 2018: liberando la verdad. Testimonios de víctimas de la violencia opositora durante el fallido intento de golpe de 2018.
Informe producido por Alliance for Global Justice y Nicaragua Solidarity Campaign Action Group y publicado en Tortilla con Sal en el que se recogen diversos testimonios de víctimas de la violencia opositora durante el fallido intento de golpe de estado en Nicaragua en 2018 y que desmonta el reiterado discurso de políticos liberales, medios y ONGs que atribuye la violencia exclusivamente al gobierno sandinista, que habría reprimido con dureza las, a su juicio, «pacíficas manifestaciones».
Los testimonios se refieren casi exclusivamente a los incidentes que tuvieron lugar mientras la policía de Nicaragua estaba confinada en sus comisarías. El 22 de abril el Presidente Ortega pidió públicamente a la Conferencia Episcopal Católica que sirviera como mediador de un diálogo nacional entre el gobierno y la oposición. Los obispos tardaron dos semanas en responder y cuando lo hicieron, impusieron varias condiciones, una de ellas fue que la policía fuera retirada de las calles. El gobierno nicaragüense aceptó esta condición antes de las conversaciones del llamado Diálogo Nacional que comenzaron el 16 de mayo y esto explica por qué la población en general estuvo expuesta durante tantas semanas a ataques violentos e intimidaciones por parte de los activistas de la oposición, como se describe en estos testimonios.
En Nicaragua, todas las víctimas de la violencia de la oposición y sus familiares son considerados Héroes de la Paz, porque han puesto la necesidad de la reconciliación en la sociedad nicaragüense por encima de su propio sufrimiento y dolor personal.
Pero eso es algo que va mucho más allá de la lamentable falta de comprensión moral, la abdicación intelectual al por mayor y el cinismo de prácticamente todos los periodistas y editores de medios de comunicación norteamericanos y europeos, y también los académicos universitarios, funcionarios de la OEA y de la oficina del Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas o de cualquiera delos representantes de las principales ONG internacionales de derechos humanos.