La Habana escribe el 1º de mayo. Ramón Pedregal Casanova
La Revolución cubana es uno de los sucesos más trascendentales del siglo XX. Una singular utopía, resultado de nuestro ser y en cuyo espacio vital se juntan sueño y realidad, imaginación y terrenalidad, haciendo gala de que ciertamente la cubanidad es también “la pasión por lo posible”.
Del libro Revolución Cubana. Algunas miradas críticas descolonizadas. Coordinador Luis Suárez Salazar. “La pasión por lo posible”, palabras del doctor Eduardo Torres-Cuevas expuestas en su conferencia “Cuba: el sueño de lo posible”.
Entre las casas se enrojece el cielo. La Habana prepara el 1º de Mayo. Antes del amanecer la clase trabajadora ha escrito en sus puertas y ventanas, en cartones y papeles de cuaderno: ¡Viva el 1º de Mayo! ¡El 1º de Mayo a la Plaza!
El río de palabras va calle a calle para que se adelante al sol la clase obrera cubana, y antes de que el horizonte rojo suba poco a poco, casa a casa, se han reunido quienes empujan la luz al ágora.
Masas y delegaciones del mundo con Cuba Soberana, con Cuba en el sol rojo, salen en desfile a festejar la pasión y la gloria humana.
Desde La Habana viendo la llegada del 1º de Mayo.