Marco Rubio, alias “Narco golpista en jefe”, es un fracasado
Marco Rubio, alias “Narco golpista en jefe”, como le llaman en su entorno, ha dicho con suma claridad que su futuro esta ligado al de Trump, el mismo que dispara a diestro y siniestro a cualquiera declarándole “fracasado”, y el trumpismo es la muestra palmaria del fracaso absoluto en las relaciones con el resto del mundo. Marco Rubio, precedido por su historia, es un fracasado, algunos datos de éste personaje pueden conocerlos en los artículos “Marco Rubio subcontrata a Rosa María Paya”, “Marco Rubio: Mackie Cuchillo”, “De la matanza en casa del imperio, a la matanza del imperio en Latino América”, “Marco Rubio en fotos, y algunos datos”, “El doblador de Monroe”, “Le ha ido mal. Al ultraderechista Marco Rubio le ha ido mal”, “La banda amenaza al mundo: Rubio, Pompeo, Bolton, Pen, Abrams, Trump”.
El “Golpista en jefe”, como su alias indica, es el enemigo de todo lo que signifique dignidad, igualdad de derechos, libertad de los pueblos y naciones, y su prioridad política, así lo ha declarado, es conseguir, mantener y profundizar la desigualdad, la división social, el aplastamiento de cualquiera que intente protegerse de su violencia imperial. Su historial de actos responde al envoltorio que es el lenguaje. Es por eso por lo que su odio se manifiesta tan claramente cuando habla de Venezuela, Cuba o Nicaragua. Sus amigos conocidos son Uribe, el asesino del Che, los fascistas nicaragüenses, los terroristas de la ultraderecha cubana, los golpistas venezolanos, … Marco, o, “Narco” como le apodan algunos suyos, dispone del título de senador por los apoyos del fascismo de Miami, por la ultraderechista Asociación Nacional del Rifle, por los impulsores de negocios con la guerra que arrancan en el complejo industrial-militar, y de todos los centros de fuerza generadores de violencia de EEUU en el hemisferio Latino Americano y en el resto del mundo. El empeño de Rubio es introducir factores de desestabilización social, bloqueo económico, guerra comercial y bancaria, introducción de mercenarios y su financiación, difusión de noticias falsas, terrorismo para causar conmoción social, dirige el autonombramiento del ladrón que se declara presidente de Venezuela y dedica su tiempo a robar los bienes en el exterior y declararse por encima del Derecho Internacional: injerencia tras injerencia, lo propio de delincuentes internacionales. Un ejemplo para ver con claridad a éstos estadounidenses: son dueños de más del 50% de la riqueza mundial y dicen tener derecho al 100%.
Narco Rubio tiene a su cargo los ataques a Venezuela, Cuba y Nicaragua, y es responsable del área de guerra que la realiza. La ONU, la Organización de los Países No Alineados, hasta 145 países han declarado que tan sólo reconocen como presidente legítimo de Venezuela a Nicolás Maduro, y que las acciones que en el clan Trump, que dirige Rubio, son ilegales y causan daño social, lo que sólo recibe su condena.
Junto a Rubio se sitúan personajes conocidos como Pompeo, el que ha declarado públicamente que miente, inventa y provoca como profesional de la CIA; Bolton, de quien el mismo Trump ha declarado que por él empezaría una guerra contra todo el mundo de una vez, y a ellos se añade Abrams, un condenado por terrorismo, que vino a España a dar órdenes a Pedro Sánchez, y así su esbirro Guaidó tiene apoyo político, no hay más que recordar el ultimatum que don Pedro dio al Presidente Nicolás Maduro, o la protección en la embajada que ha ofrecido al terrorista Leopoldo López, condenado por los tribunales; a eso añade la articulación dentro y fuera del país de la oposición golpista al proceso democrático revolucionario, la misma que comanda Narco Rubio. Éste es el mismo que ha declarado que Trump se ha rodeado de gente que origina la situación de crisis por la que pasa Venezuela, que al autoproclamado Guaidó, al que sólo reconocen 50 países dirigidos por EEUU y ha resultado un fracaso, de ahí que tengan que presionar con sanciones, bloqueos e injerencias de todo tipo a los que reconocen al Presidente Maduro y llamen a la paz. Entre las presiones que realiza, recaen sobre la UE la exigencia de imposición de sanciones a Venezuela y la retirada de visados.
Rubio con su historial contra Obama en su política de entendimiento con Cuba ya estableció la conexión del odio a Venezuela, y declara que el cambio democrático de esos países no interesa a la élite de EEUU.
No deja de llamar la atención que su grupo mercenario comandado por el autoproclamado Guaido, sea conocido por la corrupción y el desvío de fondos hasta del departamento de Estado estadounidense, las fiestas con prostitutas, el robo de empresas del Estado de Venezuela en el exterior, las acciones terroristas, las autoproclamaciones únicas en el mundo, la petición de que el imperio invada su país y de bloqueo alimenticio, medicinal y financiero, … así son los esbirros del imperio.
Todos los involucrados en los actos imperialistas se han manifestado contrarios a las Naciones Unidas, y EEUU ha llegado a abandonar la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. A eso añaden su deseo de invasión militar para hacer valer que América Latina es el “patio trasero” de quien les alimenta. Marco Rubio, alias “Narco golpista en jefe” ha declarado que semejante proceder “es parte crucial en la política de EEUU. Estamos -ha añadido- en un punto principal en la historia de América Latina”.
No es muy difícil encontrar miserables, inhumanos y fracasados como Rubio, el “golpista en jefe” es un ejemplo paradigmático de todos esos. La conexión que establece entre Venezuela y Cuba como países a asaltar porque a EEUU no le interesa ni su independencia ni su proceder soberano, es su último vómito en el water closet periodístico que le jalea como un sólo mercenario bien pagado.