Carta del Presidente Constitucional de Venezuela, Nicolás Mauro Moros, a los pueblos del mundo
Nuestros compañeros del Comité de Solidaridad Internacional (COSI) de Venezuela, nos hacen llegar la carta que el Presidente Constitucional de Venezuela, Nicolás maduro Moros, ha dirigido a los pueblos del mundo denunciando las más recientes acciones de hostigamiento contra su persona para tratar de hacer fracasar el proyecto de liberación nacional y soberana de la República Bolivariana de Venezuela.
El Frente Antiimperialista Internacionalista expresa su más contundente apoyo al Presidente Constitucional de Venezuela y al pueblo venezolano en su heroica resistencia y determinación de organizarse por sí mismos, sin admitir la menor injerencia en sus asuntos internos desde potencias exranjeras.
Al mismo tiempo, el FAI llama la atención del Gobierno del Reino de España acerca del papel que está jugando su diplomacia, que no ha cesado de inmiscuirse en sus asuntos internos, en contra de todas las prácticas del derecho internacional, solo para satisfacer a la administración de los EEUU y a los intereses empresariales del capital español allí invertido. El pueblo español no tiene nada contra el pueblo venezolano ni contra la forma en que mejor consideren que deben organizarse.
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No comprendo por qué el gobierno venezolano no encarceló al Juan Guaidó tan pronto como este desoyó la voluntad popular mayoritaria de elegir nuevamente a los bolivarianos para gobernarles, dado que dicho gobierno bolivariano está y fue legitimado en elecciones libres por la mayoría de los votantes una y otra vez. En ello yo no veo otra cosa que el miedo inspirado por las amenazas de los matones del mundo (los yanquis).
Creo (y digo creo) que, asimismo, no se atrevieron a desalojar la embajada estadounidense más que mediante una orden que los yanquis no cumplieron y los bolivarianos no se atrevieron a emplear la fuerza para hacer efectiva la orden gubernamental.
Si así fue, la moraleja sería: «De aquellos barros, estos lodos»: El robo del oro y otras reservas e incluso empresas venezolanas en el extranjero, llegando a servirse del autoproclamado «presidente encargado» de Venezuela, Juan Guaidó, al que si mal no recuerdo le confiaron enormes cantidades del dinero robado por mor del reconocimiento de este por los matones como el auténtico presidente de Venezuela (!) y que sé yo cuántos otros dislates acaecidos a lo largo de esta inacabable historia.