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Estudiad la tabla periódica de los elementos. El lince

Occidente es irrecuperable. Solo su destrucción -y Europa ya se está destruyendo a sí misma– podrá llevar algo de estabilidad y alegría al planeta. Tomadlo como un deseo para el año que viene. Cuanto antes desparezca su hegemonía, mejor para todos.

Los occidentales no saben lo que es causa y efecto. Si Rusia monta el pollo en el país 404, antes conocido como Ucrania, la culpa es de Rusia y no de la expansión de la OTAN y el apoyo a los neonazis. Si la resistencia palestina monta el pollo, la culpa es de la resistencia palestina y no de una ocupación ilegal por parte del IV Reich sionista, antes conocido como Israel, que se mantiene desde hace casi 80 años con el apoyo occidental. Así todo.

Si los chinos responden a la constante agresión estadounidense con los chips, los aranceles, las sanciones y todo lo demás y restringen casi totalmente la venta de minerales de tierras raras -que son un conjunto de 17 elementos fundamentales para la tecnología armamentística, especialmente- «la amenaza china» se cierne sobre nuestra seguridad.

La decisión china, harta de las agresiones occidentales, en este caso de EEUU, se tomó a primeros de diciembre. Entonces os dije que con esta decisión, todo el afán occidental de aumentar los gastos militares se encuentra ante el cuello de botella de los minerales raros. Sin ellos, lo mucho que puede hacer Occidente es modernizar algo lo que ya tiene, esas «wunderwaffen», esas armas maravillosas que arden igual de bien que sus antecesoras nazis como Rusia está demostrando en el país 404. Os recuerdo cómo está la cosa.

Pues bien, Occidente está en pánico total. No lo digo yo, que también, sino la propia OTAN. Acaba de publicar un informe que enumera «12 materias primas esenciales para la industria de defensa aliada, materiales que son indispensables para fabricar sistemas y equipos de defensa avanzados». La lista es esta y lo podéis ver en su página oficial.

Mirad bien esto: aluminio, berilio, cobalto, galio, germanio, grafito, litio, manganeso, platino, titanio y tungsteno son imprescindibles, «vitales», como dice la OTAN, «para mantener la ventaja tecnológica y la preparación operativa de la OTAN. Las interrupciones en su suministro podrían afectar a la producción de equipos de defensa esenciales». Como veis, la cosa no pinta nada bien para la OTAN, con problemas para los aviones, los tanques, los cohetes, los submarinos, los acorazados, los obuses, las municiones, los torpedos y los fusiles. O sea, que tiene problemas con todo.

Da la casualidad que 7 de estos 12 componentes «vitales para mantener la ventaja tecnológica» de la OTAN (?) -no deben estar viendo las llamas que salen de sus armas en el país 404, desde luego- están controlados por China. Por lo tanto, como también os dije, China ha dado un golpe fenomenal a la industria militar occidental, que tiene que correr buscando proveedores alternativos si quiere salir del atolladero en que la ha metido Rusia (y más si EEUU sigue con su histeria de Taiwan). Y, si los encuentra, no será en las cantidades que acaba de perder en China. No es el golpe definitivo, pero no le falta mucho. Y lo acaban de reconocer.

Fue Mao quien dijo eso del tigre de papel para referirse a lo que aparenta fuerza pero no es más que eso, apariencia. El ridículo de la OTAN en el país 404 lo pone de manifiesto. Sin esos componentes, sin esos elementos, la OTAN solo se atreverá, como hace siempre, con los más débiles y nunca con los que están no ya a su nivel, sino por encima de ella. Y con los civiles, como hace siempre y con Serbia como colofón y su neolengua de «daños colaterales».

Los elementos de tierras raras son la base de la tecnología de defensa moderna, incluidas las armas guiadas con precisión, las plataformas furtivas y los sistemas de comunicaciones avanzados. China tiene el control más que evidente sobre los materiales de galio y representa el 98% de la producción mundial. Y el galio es fundamental para fabricar microchips de alto rendimiento utilizados en tecnología militar de vanguardia, como sistemas de radar avanzados y plataformas de guía de misiles. China también produce el 60% del germanio del mundo y más del 70% del grafito, del cual el germanio es un material indispensable para equipos ópticos infrarrojos, como equipos de visión nocturna y sistemas de puntería láser. Además, controla el 55% de la producción mundial de aluminio, y la relación resistencia-peso del material lo convierte en un material clave para estructuras de aviones, cascos de barcos y sistemas de misiles.

China también impone controles a las exportaciones de tungsteno y titanio. El tungsteno es un metal ultradenso que se utiliza para fabricar proyectiles perforantes. El titanio es vital para las estructuras de los aviones y los ejes de las hélices debido a su solidez y resistencia a la corrosión.

Además de lo anterior, China también domina el proceso de refinación de cobalto y litio, y representa el 68% y el 72% de la capacidad de producción mundial, respectivamente. Estos materiales son fundamentales para la producción de motores a reacción, baterías de drones y otros sistemas militares.

Así que id cambiando de mentalidad con eso de que la OTAN es el coco. Lo es para los débiles, para Libia, por ejemplo. No es un rival para Rusia y no lo es para China. Eso lo saben quienes tienen que saberlo, por eso el psicópata secretario general de la OTAN pedía no hace mucho que se aumentase el gasto para las armas en vez de para pensiones, sanidad y otras prestaciones sociales.

China ha marcado el camino para otros países y eso de las sanciones (ilegales, según el derecho internacional), a que tan aficionados son los países occidentales, se vuelven contra ellos si hay voluntad política para hacerlo.

Id estudiando la tabla periódica de elementos para saber cuál elige China para su siguiente movimiento.

Y ya puestos, en China se ha inaugurado la primera autopista del mundo sin dióxido de carbono. Tiene una longitud de 152 km (lo que sería un trayecto Madrid-Valladolid, por mencionar una referencia) y su característica es que absorbe más emisiones de las que produce. El objetivo es aumentarla a 600 km el año que viene.

P.D.- Más de una vez me han dicho que soy un catastrofista, así que para esta gente que está buscando algo de luz en Occidente, aunque luz hay y sale por el Este (véase lo de esa autopista, por ejemplo, y buscad algo parecido en Occidente) aquí os dejo un par de grietas para que entre un poco más de esa luz que algunos buscan desesperadamente en Occidente, para que suenen las campanas que todavía puedan sonar. Las señales del nuevo mundo que está en marcha ya están ahí, solo hace falta querer verlas (o sea, salir de un jardín occidental marchito).

Porque, además, año 2025 empieza con una buena noticia: el dólar vuelve a caer y está en su nivel más bajo de toda la historia, representando el 57’4% del total de las monedas de reserva mundiales. Este año que termina lo que había comenzado con el 58’41%. Poco a poco, pero la desdolarización va viento en popa. Ya lo dijo Confucio: «No importa lo lento que vayas mientras no pares». ¿Veis la luz o no?

 

Pasadlo bien.

(Publicado en el blog del autor, el 27 de diciembre de 2024)

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