Mar de leva: Por ahora con subrayado. Farruco Sesto
Fuente: www.correodelorinoco.gob.ve/wp-content/uploads/2022/07/CO-4326.pdf
Es algo que, de tan obvio, tal vez ni mereciera ser escrito: el hecho de que, por ahora, subrayado, tenemos que adaptarnos a convivir con el capitalismo en todas las escalas. No para aceptarlo, desde luego, sino para manejarnos con sabiduría en la realidad de su existencia y trabajar con ella. Porque su potencia real como estructura económica, política, cultural y militar, no puede ser desmantelada por un simple ejercicio de voluntad.
Hoy me apetecía decirlo así de claro y contundente, para algunos amigos que me leen. Pero que no se alarmen, porque no he cambiado de bando. Paso a explicarme.
Tal como lo veo, el gran reto de la civilización de nuestro tiempo es lograr transitar del capitalismo al socialismo. Pues para muchos de nosotros es evidente que el capitalismo alcanzó su techo de actuación y ha colocado al mundo en una situación de riesgo extremo.
Lo califico como reto, porque el asunto es cómo hacerlo, cómo ir llevando a cabo ese tránsito al socialismo, sin que nos destruyamos todos en el camino. Yo estoy convencido de que se puede. Y aunque así no fuera, igualmente tendríamos que seguir adelante, puesto que la alternativa de congelar la situación y detener la marcha de la historia hacia la emancipación humana no es viable.
De manera que, visto así y con ese horizonte de la gran utopía como aliciente, en lo personal no tengo duda de que, en este gran campo minado donde vivimos, en este mundo-mar de contradicciones, tenemos que saber ir avanzando, mirada larga y cuidadoso paso, sin abandonar ni por instante la pulsión hacia el objetivo. Hay un dicho muy utilizado en Venezuela, que me parece que expresa geopolíticamente la situación: el que se desespera, pierde.
Es mucho lo que está en juego. Nada menos que darle viabilidad a la esperanza. Para lo cual reivindicamos, una vez más, la diplomacia bolivariana de paz y la legalidad internacional.
Con estas consideraciones realistas como telón de fondo, quiero decir que, aunque la cohabitación con el capitalismo es inevitable, hay sin embargo tres de sus manifestaciones generales con las que no se puede convivir y a las que hay que confrontar en donde sea. Me refiero al imperialismo, al colonialismo en su versión moderna, y al fascismo.
Porque les digo, amigos, que, si las aceptásemos, ya no seríamos nosotros.