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Un solo imperialismo. Farruco Sesto

En este momento de la historia, sólo hay un imperialismo al que valga la pena referirse. El resto no cuenta.

Porque aunque es bien cierto que todavía hay países cuya visión del mundo sigue siendo colonialista e imperialista, como es el caso de algunos europeos, la verdad verdadera es que, en la realidad de hoy, dichos países están subsumidos en la órbita imperial de los EEUU. En su primer anillo. Le pertenecen. Le son sumisos, bajo el papel de “fieles aliados”.

Digamos que la existencia del imperialismo yanqui es la única a considerar como fuerza actuante, en los escenarios, presentes o posibles, de las conflagraciones. Todo lo demás suena a invento interesado y distractivo.

De manera que cuando leo en algunos columnistas, incluso en algunos que se reclaman de izquierda, hablar de un imperialismo ruso, como producto de la extraña herencia de un espíritu zarista, decimonónico, ligado con actuales ambiciones geopolíticas, la verdad es que no sé si disgustarme o sonreír con conmiseración.

No. Repito: hay un solo imperialismo desplegado en acción planetaria contra la emancipación de los pueblos, que es el de los Estados Unidos de Norteamérica.

En América Latina lo sabemos muy bien. Porque sus tropelías las hemos vivido por doscientos años y las seguimos viviendo. Lo conocemos perfectamente.

En consecuencia, hacemos nuestras, incorporándolas a la cultura política con la que nos hemos venido formado, las enseñanzas de nuestros héroes, mártires y libertadores. Como por ejemplo, las condensadas en algunas de sus frases conocidas:

“Los Estados Unidos parecen destinados por la providencia a plagar la América de miserias a nombre de la libertad”. Simón Bolívar

“Viví en el monstruo y le conozco las entrañas” José Martí.

“Toda nuestra acción es un grito de guerra contra el imperialismo y un clamor por la unidad de los pueblos contra el gran enemigo del género humano: los Estados Unidos de Norteamérica” Ernesto Che Guevara.

«Nosotros sabemos cómo concibe la paz el socialismo; pero sabemos también cómo puede concebir la paz el imperialismo. Y el imperialismo desarrolló sus fuerzas armadas para el dominio mundial, tiene bases militares en todos los rincones de la Tierra, poderosas flotas navales y aéreas, millones de soldados; la concepción militar del imperialismo fue diseñada para establecer su orden en el mundo, su paz, como la que en otros tiempos se llamó paz romana; su concepción militar fue diseñada para mantener el dominio sobre el mundo. Esta es una realidad, y nosotros debemos ser realistas.» Fidel Castro.

Y esta otra, del Comandante Chávez:
«Al imperio no hay que subestimarlo, pero tampoco hay que temerle. Quien pretenda llevar adelante un proyecto de transformación, inevitablemente chocará con el imperio norteamericano.” Hugo Chávez.

(Publicado en el Correo del Orinoco, el 24 de marzo de 2022)

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