Hablemos sobre Venezuela. José A. Amesty Rivera
Normalmente, antes, durante y post, al realizarse un evento electoral en Venezuela, recrudece la jauría mediática nacional e internacional, con mentiras, tergiversaciones, maldad, manipulación, entre otras, sobre Venezuela, que en esta ocasión del 28 de julio 2024, no fue la excepción.
Se desataron ahora, los troles (son personas -cientos de miles- en el mundo, que publican comentarios o mensajes en línea con la intención de provocar, dañar, molestar o perturbar, bien sea a otras personas, gobiernos y Estados); los bots (son programas informáticos diseñados para automatizar tareas en línea. Pueden ser utilizados para diversas finalidades, normalmente para manipular, engañar y causar daño, dolor y sufrimiento. Los bots de manipulación, se utilizan para amplificar ciertas opiniones o desinformación, creando la ilusión de que hay un apoyo masivo para derrocar un gobierno. Recomendamos el texto de: Byung-Chul Han (2022). La Infocracia. La Digitalización y la Crisis de la Democracia. Buenos Aires, Taurus. Este libro está disponible en la red.
En este sentido, nos vemos en la obligación de compartir información sobre Venezuela; en este caso, haremos un apretado resumen, y nos quedaremos cortos, para no hacer muy largo el artículo. Se incrementan las siguientes preguntas: ¿Hay democracia en Venezuela? ¿Las elecciones son arregladas? ¿Hay dictadura en Venezuela? ¿Nicolás Maduro es un dictador? ¿Hay crisis económica en Venezuela? ¿Hay migración? ¿Hay Estado de Derecho en Venezuela? ¿Hay libertad de prensa en Venezuela? ¿Hay respeto a los derechos humanos? ¿Se han cercenado las libertades e irrespetado las instituciones del Estado venezolano?, y tantas otras… Abordemos estas.
Democracia: para los que la democracia es sinónimo de Elecciones, les informamos que, en Venezuela, se han realizado, alrededor de 30 elecciones diversas, no solo presidenciales, desde 1998, año en que Hugo Chávez fue electo Presidente, e inició un proceso de democratización de los poderes del Estado con altos niveles de participación del pueblo en las decisiones; a esto se le llama Democracia Participativa y Protagónica. Además, en Venezuela el voto no es obligatorio, y aun así el porcentaje de participación de las últimas dos décadas, está por arriba del 70 por ciento, mayor que lo que sucede en los Estados Unidos, España, Colombia, Perú o Chile. Esta democracia, de todo el pueblo, y no con populismo ni fascismo, ha tenido logros extraordinarios para esa misma población. La Democracia Participativa y Protagónica, es el triunfo de las mayorías, de los excluidos/as, de los invisibilizados/as, de los obreros/as, los campesinos/as, sobre la alianza de los partidos de la burguesía y las oligarquías existentes sumisas, durante décadas, al imperialismo.
Elecciones arregladas: el Poder Público Nacional venezolano, se divide en Poder Legislativo, Ejecutivo, Judicial, Ciudadano y Electoral, este último, es un Poder diferenciado del Ejecutivo que asume los procesos electivos. El sistema electoral venezolano ha sido reconocido por observadores internacionales, en distintos procesos comiciales, como uno de los más confiables y modernos del mundo. Participaron 37 partidos políticos y 13 candidatos. En el sistema electoral venezolano, no es posible ningún tipo de «arreglo», trampa, engaño, estafa, fraude, ya que, cuando alguien acude a votar, primero pasa a presentar su cédula o documento de identidad, para verificar sus datos y corroborar la mesa en la que vota. Una vez hecho esto, acudirá a la mesa correspondiente que tendrá una máquina de voto. En una pantalla táctil, aparecen todos los candidatos/as disponibles y se pulsa sobre el elegido. Por cada voto, la máquina emite una papeleta, es decir, un papel donde el elector, puede comparar que su voto es el mismo que la máquina registra, que ambos coinciden. A su vez, esa papeleta se deposita en una urna. Entonces, por un lado, cada máquina registra los votos, que se envían al centro de totalización en el Consejo Nacional Electoral-Caracas y, por otro, a cada máquina le corresponde una urna, donde se recogen estos mismos votos en papel. Además de la transmisión, al final de la jornada electoral, cada máquina imprime un acta de escrutinio (que tiene un código QR, un papel de seguridad), con todos los votos que ha registrado. También hay auditorías en al menos el 50% de los centros electorales, donde se comprueba que las papeletas depositadas en las urnas, coinciden con lo que la máquina emitió electrónicamente. Esto no permite ningún tipo de anomalía.
¿Dictadura en Venezuela? ¿Nicolás Maduro es un Dictador?: hay toda una campaña mediática de la oposición venezolana, hacia el exterior e interior de Venezuela, enfatizando que en el país hay un dictador, una dictadura ejercida por el Presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros, y más aún, a partir de que el mandatario venezolano haya activado el poder originario del pueblo, al proponer una Asamblea Nacional Constituyente, acto constitucional y legalmente ejercido.
No es cierto que el gobierno del presidente constitucional, Nicolás Maduro, sea una dictadura. Precisemos que un dictador no respeta, e irrespeta su propia Constitución, este no es el caso de Nicolás Maduro, quien, en todos sus actos, y periodos de gobierno, siempre actúa velando por la constitucionalidad de sus políticas. En los años de gobierno revolucionario, nunca se ha roto el hilo constitucional. Precisemos en términos generales que, la dictadura es un sistema de gobierno o régimen gubernamental, donde todos los poderes del Estado se concentran en un individuo, un grupo o un partido. El dictador no permite la oposición a sus acciones y a sus ideas, tiene poder y autoridad absolutos. Se trata de un régimen no democrático, antidemocrático y autocrático, donde no existe la participación del pueblo.
Hay varios tipos de dictaduras, pero todas, tienen un componente militar que las caracteriza. Que en algunos casos se implementan, a través de los llamados golpes de Estado, y que es una forma de gobierno donde el poder está completamente controlado por los militares. A su vez, sus características más sobresalientes son: poder sin límites, no hay Leyes Constitucionales, intromisión en la vida privada de las personas, desvanecimiento de la figura del Presidente electo y constitucional, control de los medios de comunicación masivos, violación de los Derechos Humanos, control a través del miedo, la Iglesia como medio de dominación, entre algunas otras, y ninguna de las anteriores apela a la figura presidencial re-electa del ciudadano Nicolás Maduro Moros.
Finalmente, un dato manipulado, tergiversado y manoseado, es que el presidente Maduro, tiene, solo, dos periodos de gobierno, de seis años, electo y re-electo constitucionalmente a través de los votos, e inicia un nuevo periodo de gobierno, igual de seis años más. Sin pagar ni obligar al pueblo soberano, este acude a las elecciones, vez tras vez, a legitimar a su máximo líder.
Para concluir este apartado, precisemos la diferencia entre Democracia y Dictadura. Democracia: El gobierno es de todos. Existen elecciones, libres y periódicas. El mandato de los líderes es por consenso de los gobernados. Los líderes políticos son responsables de las acciones del pueblo. El poder se halla concentrado en la Constitución. La parte oponente, la oposición, tiene acceso a los medios de comunicación. Se permite la crítica. Se protegen las libertades civiles. Se respeta el derecho de las minorías. Se considera como oponente a quienes están en contra del grupo político que se encuentra en el poder. Dictadura: El gobierno es de uno solo. No existe la libre elección. El dictador manda sin el consenso de los gobernados. Los líderes responsabilizan al pueblo por sus acciones. No hay constitución vigente. Los medios de comunicación son controlados. Se prohíbe la crítica. Se prohíben las libertades civiles. Se ignora por completo el derecho de las minorías. Se considera como enemigo a quienes están en contra del que se encuentra en el poder.
Crisis económica en Venezuela: hay que diferenciar las crisis generadas por los propios gobiernos (como el del presidente argentino Mauricio Macri y su política neoliberal que solo beneficia al sistema financiero), de las crisis inducidas, por sectores financieros nacionales e internacionales dirigidos por el gobierno de los Estados Unidos, por ejemplo, contra Venezuela, a través de: congelamiento de cuentas, sabotaje a la tasa de cambio, extracción del papel moneda, acaparamiento, desabastecimiento y guerra mediática. A pesar de los efectos de varios años de guerra económica, el gobierno bolivariano implementa acciones para garantizar la estabilidad y la paz del país: aumento del salario mínimo integral cada dos meses, incremento permanente de la inversión social, cinco millones de viviendas construidas y entregadas a familias de los sectores más vulnerables. Entrega directa de alimentos a más de 6 millones de familias, a través del programa Comités Locales de Abastecimiento y Producción CLAP, lanzamiento del sistema de criptomonedas Petro con respaldo en activos reales de las reservas petroleras.
Hay una crisis económica, pero no es cierto que la situación en Venezuela sea catastrófica y mucho menos de tragedia humanitaria. Si es cierto que tenemos problemas económicos y políticos, pero que no rayan en el caos ni en la tragedia, aclarando que estos problemas son causados, por ejemplo, por los empresarios venezolanos que boicotean la economía escondiendo sus productos y bajando la producción de alimentos, además como ya mencionamos, de estar acompañados por la política injerencista, guerrerista, colonialista de Estados Unidos. Ante esta política de la oposición política, el gobierno bolivariano ha incrementado políticas contrarrevolucionarias, que han surtido el efecto necesario, tales como: incremento de salarios, proveyendo cajas con alimentos subsidiados a las comunidades del país, entre otras, como igualmente ya indicamos arriba.
Migración en Venezuela: producto de las condiciones a las que la guerra económica somete al pueblo venezolano, muchos y muchas han decidido probar suerte buscando trabajo temporal fuera de su país, tal como ha sucedido con millones de compatriotas centroamericanos, de la región Andina y de Sur América, que durante décadas han migrado de sus países. Pero se ha construido un discurso desde los sectores antichavistas, que en Venezuela hay una catástrofe porque gobierna «el populismo» y «el comunismo». Ahora bien: ¿Qué podemos decir de México, con sus 41 millones de mexicanos/as que viven en los Estados Unidos? ¿Qué podemos decir de Colombia? Se calcula que mucho más de cinco millones de colombianos/as viven en Venezuela, un millón en los Estados Unidos y 135 mil en España. Se calcula que en Argentina viven unos 38 mil venezolanos/as, mientras que existen 87.574 peticiones de residencia de ciudadanos/as colombianos/as entre temporal y permanente.
Éxodo de venezolanos al exterior, ¿por qué salen?: se ha hablado mucho sobre el fenómeno migratorio de venezolanos al exterior. La oposición al gobierno de Nicolás Maduro, ha utilizado, las redes sociales y otros medios, para desinformar e involucrar hechos políticos y económicos, para de una manera justificar el éxodo de venezolanos al exterior, pero el fenómeno migratorio va mucho más allá al supuesto rechazo del gobierno de Nicolás Maduro; si lo midiéramos por allí, Nicolás Maduro saldría fortalecido, ya que son más los venezolanos que se quedan, que los que se van, no todos los que parten son opositores. Entonces el análisis no puede ser únicamente político. Existen muchos factores para que una persona busque nuevos y lejanos derroteros.
Veamos algunos datos: según la ONU, existen alrededor de 250 millones de personas en el mundo, que no viven en su lugar de origen. Solo empezando por allí, nuestra diáspora es insignificante ante el total mundial. La justificación del incremento de migración, es el mismo de otros ciudadanos del mundo (250 millones) que deciden emigrar: 1) Factores económicos, 2) Posibilidades de conseguir empleo y aumentar los ingresos familiares, 3) Inseguridad. 4) Obtener una mejor calidad de vida. 5) Continuar estudios y especializaciones, entre otras.
Un elemento a señalar es que el estándar de vida del venezolano, era más elevado que el de Estados Unidos. Y nos acostumbramos al consumo en exceso. Al surgir la Guerra Económica, la cual desean desconocer e invisibilizar, causada por los empresarios venezolanos y extranjeros, el venezolano no es capaz de soportarla y el camino más expedito es huir hacia afuera, alimentado por los medios y su maquinaria opositora.
Estado de Derecho en Venezuela: la definición corta de estado de derecho es, «Estado cuyo poder y cuya actividad están regulados y garantizados por ley», y sus características son: división de Poderes, control y Fiscalización de los Poderes Públicos. ¿Qué es vivir en un Estado de Derecho?, Significa que se vive en un país que rige su vida diaria y sus interrelaciones mediante el uso de la Constitución Política, Leyes, Reglamentos, Normas y Códigos. Durante el periodo de gobierno del Presidente Hugo Chávez (1999-2012), y del Presidente Nicolás Maduro, es el tiempo donde se han elaborado y puesto en ejecútese, las más diversas y cuantiosas Leyes de la República, para el beneficio del pueblo en general, y esto ha significado la mayor transferencia de poder político al pueblo que se haya conocido jamás en Venezuela, la construcción de un Estado Social de Derecho y de Justicia, el rescate de la dignidad de las venezolanas y venezolanos, garantizando sus derechos a través de las misiones sociales, favoreciendo el acceso a la salud, seguridad social, alimentación, vivienda, educación y trabajo entre otras.
Libertad de Prensa en Venezuela: en el Gobierno Bolivariano se ha democratizado el espectro radioeléctrico en señal abierta. Es decir, en el año 1998 existían 40 televisoras, en la actualidad, a lo menos, Venezuela tiene 111 concesiones en televisión abierta, de las cuales 61 son privadas, 13 del Estado y 37 comunitarias. En cuanto a radio, en 1998 había 342 concesiones, ahora hay 466 privadas, 82 operadas por el Estado y 243 comunitarias. En televisión, es diferente, el 80 % del espectro era privado, sin embargo, observamos un proceso en que predomina un nuevo factor, el de los medios comunitarios y alternativos, que hoy ocupa 33 % del espectro en televisión versus 13 % de los medios públicos; pero aun así hay una hegemonía, sobre casi 60 % de las concesiones en televisión que siguen en manos privadas.
Respeto a los Derechos Humanos en Venezuela: con la Constitución venezolana de 1999, se transformó el Estado venezolano, permitiendo garantizar los Derechos Humanos de los sectores vulnerables en el país. Los derechos humanos son el resultado de luchas históricas y sociales por parte de aquellos grupos vulnerables por las grandes élites dominantes que controlan el poder económico y político en Venezuela. Con el triunfo y la llegada al poder de Hugo Chávez se inició un proceso Constituyente para adecuar el Marco Constitucional e Institucional y transformar el Estado y dar origen a una Constitución que consagró la preeminencia de los Derechos Humanos. La Constitución de 1999 marcó el inicio -de forma legal- de la Revolución Bolivariana, y a través de ella se impulsó el Socialismo del siglo XXI, que renovó la manera de gobernar en América Latina y dignificó a los sectores menos favorecidos, históricamente ignorados y oprimidos por la extrema derecha.
¿Se han cercenado las libertades e irrespetado las Instituciones del Estado Venezolano?, No es cierto. El caso de la Asamblea Nacional opositora, en su momento, es un caso donde ella misma entró en desacato al no cumplir una orden del Tribunal Supremo de Justicia, quien debía desincorporar a tres diputados que no fueron electos legalmente. Asimismo, en aquel momento, la oposición decidió por su propia cuenta no participar en la Asamblea Nacional Constituyente, y por ende, no postuló candidatos y candidatas a la misma. Otro caso fue el llamado que hizo el presidente Nicolás Maduro a la elección de una Asamblea Nacional Constituyente, que es totalmente constitucional, basado en los artículos 347, 348, 349 de la Carta Magna venezolana. Lo cierto es que votaron la Constituyente 8 millones de personas, dejando de votar 2 millones, por obstáculos, amenazas u otra suerte de impedimentos contra los que deseaban votar, coartando así el derecho al voto, que en nuestro caso es un derecho humano.
Una palabra sobre el bloqueo, la guerra económica, las medidas coercitivas e unilaterales: para contrarrestar esta arremetida imperial, Venezuela ha tenido que crear una Ley Constituyente Antibloqueo ante una guerra no declarada, invisible, cuyos efectos no vemos, pero sentimos en la vida, en el trabajo en la conciencia. Es una guerra multiforme y, como toda guerra, cruel e inhumana. Ante esto, la Ley en su artículo N.º 1, señala: «establecer un marco normativo especial y temporal que provea al Poder Público venezolano de herramientas jurídicas para contrarrestar, mitigar y reducir, de manera efectiva, urgente y necesaria, los efectos nocivos generados por la imposición, contra la República Bolivariana de Venezuela y su población, de medidas restrictivas o punitivas, emanadas o dictadas por otro Estado o grupo de Estados«. En síntesis, la Ley Antibloqueo, debe dar respuesta desde el punto de vista estratégico a todas las sanciones impuestas por EEUU.