Terroristas Cubanos/as e Instituciones Extremistas. José A. Amesty Rivera
En el mes de noviembre 02 pasado, fue publicada en Gaceta Oficial de la República de Cuba, una lista de personas e instituciones radicadas en EEUU, las/os ciudadanos/as, responsables de incitar, organizar y financiar acciones que afectan el orden social interno en Cuba, y las entidades, quienes organizan, financian, proveen medios y ejecutan acciones contra la seguridad del Estado cubano.
Las personas en cuestión, son 61 sujetos, además de las organizaciones 19, reiteramos con elementos probatorios debidamente documentados, y con implicaciones en la promoción, planificación, organización, financiamiento, apoyo o comisión de actos materializados en el territorio nacional o en otros países, en función de actos de terrorismo.
Damos a conocer el contenido de esta Gaceta Oficial Cubana, ya que no es conocida su publicación en medios, que no sean los estrictamente cubanos, y para darla a conocer como parte de las acciones del Estado cubano, en prevención y ataque a este mal conocido en perjuicio de la nación.
Gaceta Oficial, del 2 de noviembre 2023, resolución 19/2023, del Ministerio de Justicia de Cuba, firmada por la Jefa de la Dirección General de Investigación Criminal, Primer Coronel, Moraima Bravet Garófalo.
No en balde, además, estas personas e instituciones hacen su trabajo en países de America Latina y otros continentes, y deben ser reconocidas como extremistas en todo el mundo.
Entre las personas más conocidas, y destacadas por sus acciones terroristas de diversa índole están: Santiago Álvarez Fernández Magriñá, Ramón Saúl Sánchez Rizo, Ana Olema Hernández, William Cabrera González, Michel Naranjo Riverón y Eduardo Arias León.
Integran la lista, además, Yamila Betancourt García, Alexander Otaola Casal, Orlando Gutiérrez Boronat, Eliecer Ávila, Liudmila Santiesteban Cruz, Manuel Milanés Pizonero, Alain Lambert Sánchez (Paparazzi cubano) y Jorge Ramón Batista Calero (Ultrack).
Resalta la participación de estos y estas en sabotajes y otras acciones punibles, por medio del reclutamiento de personas en el espacio digital.
Destacando la aparición en el documento de Alexander Alazo Baró, sujeto del Expediente Investigativo 27/2020, iniciado por el ataque con un arma de fuego a la embajada de Cuba en los Estados Unidos.
A su vez, las entidades y organizaciones mencionadas en la Gaceta son: ALPHA-66, Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Ex Club (Asociación de Ex Prisioneros y Combatientes Políticos Cubanos), Hermanos al Rescate, Movimiento Democracia, Partido Unidad Nacional Democrática (PUND), Comandos F-4, Junta Patriótica de Cuba, Movimiento 30 de noviembre, Asamblea de la Resistencia, Movimiento Clandestino, Comando C-40, Partido Nacionalista Cubano (PNC), Cuba Primero, Lobos Solitarios, Nueva Nación Cubana, La Nueva Nación Cubana en Armas, M20 Movimiento de Resistencia Escuadrón Amalia (MREA), Auto Defensa del Pueblo.
Recordemos, además, que este 6 de octubre pasado, se conmemoró una vez más, el Día de las Víctimas del Terrorismo de Estado; acciones contra Cuba que acumulan la muy lamentable cifra de más 3.400 muertes.
Indigna saber que no pocos responsables de estas muertes, jamás han respondido a la justicia, algunos murieron, simulando una venerable ancianidad, como es el caso del tristemente célebre, el terrorista confeso Luis Posada Carriles. Otros viven aún, por ejemplo: alguien que acumula una hoja de terror y muerte contra el pueblo de Cuba: Santiago Álvarez Fernández-Magriñá. En los últimos días, Fernández-Magriñá afirmó ser un pacifista, declaró derrocar a la Revolución cubana, pero ahora por vías pacíficas.
Este es solo un ejemplo del actuar de estas personas bárbaras. Y nos preguntamos: ¿Qué sucedería si desde cualquier país del mundo, se pagara para provocar actos terroristas y de sabotaje en Estados Unidos? Sus voceros saldrían de inmediato a imponer su democracia a base de cañón. Pero en el caso de Cuba, su actuar es muy diferente.
Quienes pagan por desatar la violencia y el caos en Cuba, actúan con total impunidad desde suelo estadounidense. Destinan cuantiosos fondos a financiar actos terroristas en el seno de la sociedad cubana, sin que autoridad foránea alguna se pronuncie al respecto.
Recientemente en septiembre pasado, desde su cuenta en la red social X, otrora Twitter, el politólogo vasco Katu Arkonada, denuncio el viaje del ultraderechista cubano Orlando Gutiérrez Boronat a Ucrania. Fuentes en Washington confirman viaje del terrorista Orlando Gutiérrez Boronat a Ucrania para operar contra Cuba.
Boronat reside en Estados Unidos desde 1971, Director de la organización terrorista «Directorio Democrático Cubano», defiende el bloqueo y pide una intervención militar estadounidense en Cuba. Vinculado a los servicios de inteligencia estadounidenses, participó como ponente en la ultra reaccionaria Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) realizada en noviembre 2022 en México.
A su vez, denuncian indicaciones del gobierno de EEUU para “calentar” este Fin de Año 2023 en Cuba. Siguiendo las órdenes del Departamento de Estado, Ibrahim Bosh, Orlando Gutiérrez Boronat y Manuel Milanés Pizonero; así como las organizaciones: el Partido Republicano de Cuba, el Movimiento 30 de noviembre, y conocidos personajes anticubanos como Pedro Corso, Tomás Regalado y Rosa María Payá, quienes andan pidiendo presupuesto a la Organización de Estados Americanos y al gobierno de EE.UU. para incitar a una huelga de trabajadores de la salud en Granma, Holguín y Camagüey.
Recordemos además que, ya desde al menos 2022, incitan desde las redes sociales a cometer actos de terrorismo en Cuba. Jorge Ramón Batista Calero, que se hace llamar Ultrack en sus diversas plataformas de redes sociales, desde el discurso del odio promueve acciones de violencia y terrorismo contra Cuba. En agosto de ese año 2022, comenzó a promover su canal de Telegram, que más tarde pidió ramificar en diversos lugares de la geografía nacional.
Una provocación similar ha tenido lugar en el grupo de Telegram, Holguín Libertad, donde siguiendo las orientaciones de Ultrack, se realizaron llamamientos a llevar a cabo actos violentos, agresiones a los miembros de la Policía Nacional Revolucionaria y sostener las provocaciones hasta derrocar al gobierno.
Al igual que otros personajes mercenarios y anticubanos, Ultrack promueve desde Estados Unidos actos violentos que son severamente penados en las regulaciones legales de ese país.
Aún más reciente, es el caso de Yamil Cuéllar, actor cubano, quien fue denunciado en la televisión cubana por contactar a personas en Cuba, ofrecerles dinero o recargas telefónicas para que desestabilicen y perpetren acciones vandálicas al interior de Cuba. Cuéllar, ciudadano que emigró en 2005 a EEUU, ha reclutado vía WhatsApp, con el más tierno y cálido de los tratos, a ciudadanos de su pueblo natal en Cienfuegos, Cruces.
Los audios enviados por Cuéllar parecen el relato de una película de acción y comando, una fantasía sin control, pero son reales.
En fin, es toda una operación de personas, instituciones y entidades que, desde hace muchos años, viene haciendo un trabajo operacional contra Cuba.
Ya desde los años 60, por ejemplo, el Vicesecretario de Estado Asistente para Asuntos Interamericanos Lester D. Mallory, en un memorando secreto del Departamento de Estado en 1960, señalo:
“La mayoría de los cubanos apoyan a Castro…el único modo previsible de restarle apoyo interno es mediante el desencanto y la insatisfacción que surjan del malestar económico y las dificultades materiales…hay que emplear todos los medios posibles para debilitar la vida económica en Cuba…en una línea de acción que, logre los mayores avances en la privación a Cuba de dinero y suministros, para reducirle sus recursos financieros y los salarios reales, provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno”.